viernes, 9 de octubre de 2020

Exclusividad

A juzgar por su tono de voz y sus gélidos comentarios, capto que Romina está aburrida y, utilizando una serie de abreviaturas muy ridículas pero muy femeninas, me ha hecho saber lo ocupada que estará todo el fin de semana.

- No la hago, en serio, tengo cosas que hacer en casa y luego estaré "out", asi que descansare viendo Netflix o algo, y mañana quedé en verme con un amigo que no veo hace mucho tiempo, mejor lo dejamos para otro "finde".

No sé qué decir, mejor dicho, sí sé que decir. Sé perfectamente lo que debería decir. Debería decir "Claro, total, no somos enamorados, no nos debemos exclusividad, eres libre de salir con quien quieras".

Debería responder algo como eso para quedar como el rey de la tolerancia y el relajo. Sin embargo, las verdaderas frases que quisiera disparar, las que tengo que reprimir, las que se quedan dando vueltas en mi cabeza como furiosos cuyes de tómbola, son: "Claro, primero salimos, me entusiasmo contigo y a las dos semanas me cambias por otro"; "por que no dejas el cinismo de lado y me dices que ya fue"; o "si sales con otro, olvídate de mi".

Cualquiera de esas frases se ajustaría más a lo que en realidad estoy pensando. Sin embargo, haciendo de tripas corazón, no digo nada y recurro a un perfecto clisé para salir del apuro:

-Supongo que no me molesta; sal con él, normal.

¿Normal? ni yo me la creo. Siento como si estuviéramos en un avión y ella me estuviera pidiendo autorización para saltar con paracaídas por la escotilla. Si salta es por que no quiere estar aquí conmigo, por que el vuelo no la entretiene más, o por que le interesa probar la fastuosidad de otras aerolíneas, Nah, ya estoy viejo para destruirme el cerebro con encrucijadas absurdas y paltas adolescentes; si Romina quiere salir con otro, que salga, ya está, tanta vaina.

-Es un pata de la universidad, un pata bien buena onda. No pasa nada, por si acaso, pero desde hace tiempo me dice para hacer algo, y ya me da roche decirle que no. Me ha dicho para ir a un concierto, por que un primo suyo toca en un grupo de rock.   

-Hey, no tienes que darme explicaciones- le respondí con un gesto de calculada autosuficiencia.

-Ya sé, pero igual quiero contarte.

En el fondo me gusta que me de explicaciones, siento que se esta disculpando de antemano. Pero no soy tan optimista, algo me dice que no me esta contando toda la verdad, que esta tratando de menospreciar la situación para que yo no me vea más tonto de lo que ya me veo. Ese cuento del amigo "buena gente" con el que "no pasa absolutamente nada" no convence a nadie. No creo que Romina esté "haciéndole" un favor a ese paparulo que tanto la persigue. Creo que en el fondo esta feliz de haber recibido esa invitación y que tiene muchas ganas de escuchar mucho rock con ese tipo. Lo sospeche desde un principio.

¿Ahora que hago? © 2008 Template by Dicas Blogger.

TOPO